Mi clase numero diez

Clase número diez

Para comenzar el día llegué a las 7.30 como todos los días, pero ese día era la paradura y pues los niños llegarían a las 10 de la mañana; me senté con la profe adornar, a limpiar el salón.

Cuando llegaron los niños y los representantes me puse hablar con ellos, todos llegaban con ese respeto y me decían BUENOS DÍAS PROFE, para mí esto era maravilloso, todos colaboraron para el compartir, se vio la presencia de dulces como: torta de fresa, gelatinas, torta de chocolate, flan, dulce de piña, torta y bizcochuelo . Se comenzó con la actividad, salimos a la calle a pasear al niño Jesús; yo me encargué de las niñas y la profe de los niños.

Luego llegamos cada uno a su salón y se dio inicio al compartir, las representantes muy atentas repartieron los dulces y lamentablemente me tuve que retirar porque ya era tarde. En realidad este día fue totalmente diferente ya que se hizo un compartir y logré hablar con varias señoras representantes, para mí fue magnífico ver como ellas me preguntaban sobre el rendimiento de sus hijas.

Ya hoy me siento capaz de estar sola en un salón de clases con un grupo de niños como lo he estado haciendo porque veo que lo único que me hacía falta era estar sola en el aula como lo hice días pasados para darme cuenta si este es mi trabajo y si soy capaz de hacerlo.

ACTIVIDADES.

·       PARADURA

·       ADORNAR SALÓN

·       LIMPIAR SALÓN

·       MANTENER ORDEN EN LOS NIÑOS

·       PARTICIPAR  EN ORACIONES

Aprendí que en reuniones grandes debo tratar de llevar todo con calma, no desesperarme ni pegar gritos a los niños, solo se lleva el control desde un principio hablándoles desde el salón antes de salir. También aprendí que esos niños son personas indefensas que requieren de amor y cariño, por lo tanto se les debe  hablar con cariño.